lunes, 6 de junio de 2011

Hoy Dios nos había diseñado un lindo día!
Un día soleado en la mañana, perfecto para salir a caminar, sentarnos en un parque, compartir un helado y disfrutar de la tranquilidad.

No pudimos estar juntos desde temprano... pero yo solo contaba los minutos para que tu regresaras y poder ir a estar contigo el resto de la tarde, esperando que fuera soleada.

Te llamé algunas veces, pero no pude hablar contigo! Tuve paciencia.
Cuando llegué a mi casa de nuevo tu estabas ahi, triste, porque lo que querías hacer te había salido mal... yo me entristecí mucho al saberlos pues aunque no puedas creerlo, tus sueños y tus ideales son también los mios. Sentí que algo por lo que hacia unas pocas horas estaba auforica y llena de energía se había desvanecido y simplemente me quedé muda... confiando sin embargo en que nuestro día no se arruinaría. Pero no tardaste mucho en decirlo "ah ya no quiero salir hoy"

Dos cosas se había destruido, un gran sueño tuyo y una "pequeña" gran ilusión mia. Quería contener mi tristeza, esperando que lo que había escuchado fuera sólo una idea mia... pero no era así. Lo habías dicho en serio... de nuevo tu sueño material le ganó a mis sencillas ilusiones. Y entonces, sabiendo que las lágrimas iban a aparecer pronto en mis ojos y sabiendo que se me cortaría la voz al intentar hablar, hice un último gran esfuerzo para hablar y decirte "me voy aun ratico hablamos luego". Esperaba, no lo negaré, que me detuvieras con tu voz pero no fue así. Al contrario, tu sólo secundaste la idea y allí murió mi día, mis ilusiones, mi energía... y murió nuestro sol.

No tardó mucho en llorar el cielo, llorar tan fuerte que se escuchaba fuerte en las ventanas, y entonces me asomé y entendí que alguien allá arriba sabía como me sentía. Sabía lo fuerte que me apretaba el pecho y lloró por mi.

Me acosté y solo podía pensar en nuestro día, en nuestro sol, en el helado que no iba a poder compartir ya contigo, pensé en nuestra cita... una cita que no fue, aún cuando lo deseara con toda mi alma!

Creí que como en otras ocasiones, el tiempo que te tomaste era para calmarte, para regresar y quiza ser cariñoso como me habria gustado que fueras si nos hubieramos visto, pero no entiendo... aún no entiendo, por qué me haces sentir mal cuando yo sólo procuro lo mejor? porque me haces sentir culpable cuando yo fui la que dejaron de lado?
No entiendo aún, que hago tan mal para no merecer ser tan importante como tu moto, o tu trabajo, o tu guerrero... xq no puedo ser nunca una prioridad?